Aumento consolidado del ICMS
El 1 de abril entró en vigor en 10 estados brasileños un nuevo tipo de ICMS del 20% para los bienes importados por particulares, especialmente para las compras realizadas a través de plataformas internacionales de comercio electrónico.
Apodada "tasa blusa", la medida se deriva de la adhesión de los Estados a un acuerdo de Confaz, que autoriza la recaudación incluso en las transacciones directas con el consumidor final. El principal argumento es promover un equilibrio en la presión fiscal entre los productos nacionales y los importados.
Aunque está prevista en la norma, la medida ha generado debates sobre la acumulación de impuestos, el aumento de los costes para los consumidores y las repercusiones en las empresas que actúan como intermediarias o transportan estas mercancías, que podrían tener que reevaluar contratos y flujos operativos.
La aplicación de esta tasa refleja un intento de conciliar los intereses fiscales y políticos, cuyo éxito dependerá en gran medida de la capacidad de adaptar los procesos y promover una relación transparente entre las partes implicadas.